11.13.2007

A medio metro v2.0




El mayor problema no es
la altura de los muros
que entre tú y yo
razonablemente
se elevan.
El principal problema
es que ya nadie va a treparlos.

Hoy, enfrente de mí
después de tanto tiempo
que soy incapaz de conocerte.
Aún así
si me hubieras agarrado de la mano
y hubieras dicho solamente
vámonos,
te habría seguido donde fuera.

Y es que desde entonces
nunca he vuelto a huir de esa manera.
Ya no hay precipicios detrás de los abrazos.

Es porque hay que seguir viviendo
que se desvanece la culpa y hasta el diablo
aprende a perdonarse.

Por eso hoy he comprobado
que amo a una mujer que ya no existe
que sonríe diferente
y me habla desde un lugar que no conozco.
Una mujer que nada vale,
una mujer que no recuerdo,
pero con tu boca y tus rizos,
con tus mismos ojos gigantes.

Es mejor...
...pero ya nadie va a treparlos.

Pese a todo esto
y tal como están las cosas
hubo un instante en que he pensado
que me agarrabas de la mano
y me decías solamente
vámonos.

1 comentario:

tete dijo...

En mi cabeza le he puesto música. La música que cada uno de nosotros tiene por banda sonora de los momentos difíciles, cuando realmente vemos los estragos del tiempo y la ausencia. Siempre me ha impresionado la palabra desamor, por el proceso que implica y que duele.
Siempre me ha gustado el título de ese libro y lo aplico cuando leo tus poemas: "el dardo en la palabra".
Muchos besos, Esteban!!!