8.03.2009

Existiré

A laura,
torpemente.
Dentro de tres horas será lunes,
amanecerá. Pepa llegará al trabajo
con cara de sueño, hará un redondel
alrededor de la fecha de hoy
en su calendario promocional de una papelería,
contando los días hacia atrás
en espera de no sé bien qué cosa.

Nos sonreiremos los dos
aunque sea lunes y temprano
aunque sea dos de agosto
y estemos frente a una mesa de oficina;
ambos sabemos que hoy al otro
también le quedan lejos los abrazos.

Papeles y nombres y archivos y cuentas
tecleando en el ordenador, cayendo
de los dedos la arena soñada de una playa.
Y luego, al terminar, una cañita
y releer el periódico esperando el autobús
volver a casa y darle
besos en las orejas a mi perro.

Por la noche ponen
un partido de pretemporada y creo
que mi vieja ha dejado tortilla en la nevera.
Me quitaré la camiseta,
seré feliz, ya estaba acostumbrado
a ser igual de mediocre que la vida.

Haré fotocopias. Existiré.
Llegaré al final del día.

Lo malo es
que dentro de tres horas será lunes,
amanecerá,
y yo aún no sé bien cómo
voy a poder hacer todo esto
con el corazón roto.